Por David Varea, Docente universitario, Gestor deportivo y PhD en investigación de mercados

Hablar de deporte hoy en día es hablar de una industria que genera millones de dólares, una gran cantidad de empleos e incluso influencia en las políticas publicas de varias naciones. 

Pero, para que esta industria pueda funcionar, desarrollarse y sobre todo financiarse, debe ser administrada por profesionales especializados en el tema. El deporte en general tiene elementos propios de su actividad que influyen directamente en su gestión. 

La administración de empresas tradicional aplica conceptos teóricos como planificar, dirigir, ejecutar u organizar. Estos mismos conceptos se utilizan en la gestión deportiva, la diferencia se nota en aspectos propios del deporte que difieren de lo que se espera en empresas de otra naturaleza. 

La gestión deportiva se puede definir en tres grandes procesos. El primero en el que se planificaría la actividad, instalación, producto o servicio deportivo; el segundo que estaría relacionado con la propia ejecución o producción; y finalmente un tercero que seria el análisis o investigación de lo ocurrido, para con ello, poder mejorar el producto o servicio deportivo. Este tercer factor es lo que se podría llamar como la investigación en gestión deportiva, y cuya investigación podría estar relacionada con la economía del deporte, social media, derecho deportivo, ética del deporte, administración del deporte, participantes deportivos, gestores o consumidores deportivos 

(Damon y Pedersen, 2011). 

Si queremos tener resultados deportivos exitosos en los diferentes terrenos de juego, debemos tener gestores deportivos formados y capacitados en las oficinas, federaciones y organismos de control que garanticen que nuestras promesas deportivas tengan las condiciones para entrenar y competir en las mejores condiciones posibles. 

El deporte cada vez se vuelve más exigente, más profesional. Si los deportistas, los entrenadores y los cuerpos médicos están en continua capacitación, formación y entrenamiento, los gestores deportivos tenemos la obligación de hacer lo mismo.